VALORAR ANTES DE COMPRAR
Los compradores de vivienda suelen necesitar una valoración realizada por una sociedad de tasación en el proceso de obtención de financiación para la compra y habitualmente la encargan directamente o a través de la correspondiente entidad financiera después de haberse comprometido a comprar.
Sin embargo, la utilidad de la valoración de una sociedad de tasación sería mayor para el comprador si la encargara antes de cerrar la compra.
Una valoración siguiendo la norma ECO 805/2003 (las habituales para créditos hipotecarios) no sólo proporciona una opinión experta sobre el valor, sino que incluye una serie de comprobaciones que suponen una garantía enorme para el comprador. Veamos cuáles son esas comprobaciones:
- Comprobación de que la descripción de la vivienda incluida en el certificado registral o en la nota simple (linderos, dirección, superficie, habitaciones, etc.) corresponde a la realidad del inmueble que se desea comprar. La compra de una vivienda es la adquisición de una finca registral (es lo que queda registrado en el Registro de la Propiedad) y una descripción no coincidente podría dar lugar, en el peor de los casos, a que se comprara algo diferente a lo que se cree comprar y, en otros casos menos graves, a comprar algo con una superficie inferior a la registrada o con defectos en su descripción que podrían dar lugar a reclamaciones o problemas posteriores. La sociedad de tasación medirá el inmueble y comprobará todos los aspectos de la descripción registral que puedan llegar a ser conflictivos o problemáticos.
- Comprobación de las circunstancias urbanísticas del inmueble. La sociedad de tasación comprobará si el inmueble cumple con la legalidad urbanística vigente consultando las normas urbanísticas vigentes en cada momento y señalando, en su caso, posibles incumplimientos y sus consecuencias.
- Comprobación de existencia de precio de venta limitado por estar el inmueble sujeto a algún régimen de protección oficial vigente. La compra por encima del precio máximo legal puede tener consecuencias muy negativas para el comprador.
- Comprobación de la existencia de servidumbres sobre el inmueble que puedan afectar a su valor o a su uso como servidumbres de paso, de vistas, de luces o de acueducto o de separaciones a carreteras, ferrocarril o líneas de alta tensión.
- En zonas costeras, comprobación de que el inmueble no está afectado por las zonas de exclusión de la ley de Costas.
Junto con la opinión experta sobre el valor, que ayudaría a no comprar por un precio superior al de mercado, esta batería de comprobaciones permite realizar la compra con un grado de seguridad muy superior al que se tendría sin valorar y nos reafirman en la opinión de que el momento adecuado de encargar una valoración es antes de cerrar la compra (téngase en cuenta que esta valoración si se encarga con finalidad de crédito hipotecario serviría también para negociar el crédito).
